17/05/201116/05/2011

La primavera del 15-M
El domingo fue un día que recordaremos quienes asistimos a una de las manifestaciones del 15 de mayo. Quienes creen que no hay nada que hacer deberían empezar a recordar el auténtico significado de la democracia: el poder del demos, del pueblo. No tenemos por qué resignarnos. La lucha no ha hecho más que empezar, como recuerdan nuestros compañeros acampados en la Puerta del Sol. Caminemos como ciudadanos participativos, como elementos únicos y vivos de la democracia. Habrá más convocatorias. Queremos crear un movimiento de miles de ciudadanos unidos contra la corrupción, contra decisiones que no nos tienen en cuenta, contra la riqueza mientras haya alguien que no tenga qué llevarse a la boca.
La revolución no llamará a tu casa: le tienes que abrir la puerta.
Los ciudadanos recordamos lo que somos. La calle es nuestra.
Indígnate. Reacciona.
Saioa Domínguez / Pamplona (Navarra)

El cartel rojo de los candidatos conservadores
Entrando en Alcobendas, localidad madrileña en la que vivo, veo un cartel enorme rojo, con Zapatero y Tomás Gómez riendo y unas letras que rezan: "Cinco millones de parados". Y por detrás: "Me gustaría para Madrid lo que Zapatero ha hecho en España". ¿Como puede el PP hacer una publicidad semejante? ¿Es legal? Una vez pasada la indignación inicial, pensando fríamente, creo que es una buena manera de movilizar al electorado socialista apático, para que salga de casa y vote en contra de unos impresentables que son capaces de realizar semejante
publicidad.
¿Que les parecería a ellos un cartel azul, con Camps y Fabra riendo, que nos indicara el número de imputados en el caso Gürtel y los millones que nos han robado a los españoles? Que sigan así, que seremos más los que votemos para que no nos gobiernen. Y que sigan hablando Camps y Aznar, que eso también ayuda.
Concepción Vera de la Presentación
Alcobendas (Madrid)

Sorpresas de las municipales
y autonómicas del 22-M
Algunos políticos al uso siguen con su táctica de ignorar los graves problemas de la ciudadanía que ellos mismos han provocado o agravado, y, por lo tanto, las masivas protestas en docenas de ciudades de España el pasado domingo. Quizá se encuentren el 22-M con la sorpresa de un masivo descenso de votantes y un inesperado crecimiento de partidos que ellos habían conseguido hasta ahora aplastar con su injustísima ley electoral.
Felipe Seara Navarro
Zaragoza

Cómo combinar empleo

y medio ambiente
Es difícil encontrar dos políticas que se combinen mejor. Ambas son prioritarias para España. La creación de empleo tiene un obstáculo que superar: la desconfianza. Del emprendedor y también de las entidades bancarias que se blindan como nunca para conceder préstamos a las
pymes y a las familias. España tiene medios propios para crear riqueza sin tener que competir en los mismos sectores que ya están copados por otros países. No pretendamos confeccionar ropa más barata que los chinos, pero seamos los mejores diseñadores; no compitamos con Argelia por el gas, pero tengamos a los mejores ingenieros y científicos de energías renovables... Hagamos de nuestro país un pulmón verde entre África y el resto de Europa.
Eugenia I. Bolaños

Los principios de la derecha
en España
Una parte considerable de la cúpula del PP, con sus comportamientos, parece creer que el ejercicio del poder político y económico es patrimonio de la derecha. Los gobiernos de la izquierda, piensan, son situaciones anómalas y desordenadas que deben resolverse.
Creen además que la justicia debe actuar de forma implacable e inmediata sobre quienes ellos señalan, pero no sobre sus presuntos encausados, que son intocables.
Piensan que la mentira es útil, basta con repetirla para ser verdad.
Son amables con sus corruptos, sencillamente –piensan– tuvieron mala suerte al ser descubiertos. Porque en política, nos lo dicen con sus actividades, se está para forrarse y lo público es una cantera sobre la que debe intervenir la privatización. Así, lo que ha sido de todos, poco a poco pasa a manos de esa gente que tanto gana y que tan bien sabe apoderarse del dinero de los demás.
José Aguilar Espinosa
Granada

Un corazón desgarrado
por las ausencias
Tengo una amiga de 32 años que lleva ocho lejos de su hijo. Lo dejó con apenas 2 años. Desde el día en que se separaron sólo ha vuelto una vez a su país, 15 días que le dejaron un desgarro aún más profundo en el corazón. Ahora, mi Gobierno le acaba de denegar el permiso para traerle. Según el frío papel que le entregaron, sus ingresos "no son suficientes". Gana 1.100 euros por cuidar durante 16 horas al día de una anciana a la que sus hijos no pueden atender. Su historia es apenas una gota en el mar de soledades y tristezas que viven a diario miles de inmigrantes, forzados a separarse de las personas que más aman y observados permanentemente por una parte de la sociedad que ahora les acusa de "traer enfermedades" y de "llevarse todas las ayudas".
Cuando hayan pasado las elecciones, después de que aquellos políticos que abrazan alegremente el racismo y la xenofobia hayan brindado por sus éxitos, mi amiga seguirá mirando la foto de su hijo y anhelando sus abrazos. ¿A quién le importan las elecciones?
Josep María Deop Murillo
Barcelona