Cartas de los lectores

08 de noviembre de 2009

La juventud religiosa
Recientemente el Tribunal de Derechos Humanos de Estrasburgo sentenció que los crucifijos situados en las paredes de las escuelas publicas suponían una coacción a la libertad de pensamiento de los alumnos.
Desde la ideología conservadora se rebate esta sentencia manteniendo que España es un país eminentemente católico.
Vamos a la realidad. Según una encuesta realizada a 4.000 jóvenes de toda España entre los 15 y 24 años por la Fundación Santamaría (vinculada a la congregación de los marianistas), se comprobó que los jóvenes que se declaraban católicos bajaron del 77% en 1994 al 49% en 2005. Desmenuzando los datos comprobamos que, del 49% que se declararon católicos, solamente un 10% se consideraba practicante, frente al 39% restante, que se consideraba católico no practicante. El resto de las religiones sumaba un 2% del total, mientras que el 49% de los jóvenes encuestados se consideraban indiferentes, agnósticos o ateos.
Hay que resaltar que en la citada encuesta la Iglesia católica era la institución que generaba menos confianza entre los jóvenes, por debajo de las multinacionales y de la OTAN.
¿Se tienen que seguir heredando los esquemas impuestos por el nacionalcatolicismo de la época franquista?
Emilio González López

Las drogas pasan factura
Las bebidas etílicas matan, anualmente, a 2.000 jóvenes en accidentes de circulación. Los alcaloides originan saturación en las urgencias hospitalarias. El éxtasis provoca lacras mentales. "Las drogas siempre pasan factura. Abre los ojos", dice la comunicación publicitaria.
El estudio de la Oficina Nacional de Control de la Drogadicción de Washington refrenda que los alcaloides pueden producir daños como zozobra, melancolía, brotes psicóticos o tendencia al suicidio. La droga es una de las plagas de la sociedad de nuestros días.
Gabriel Roselló/ Madrid

‘Miss’ belleza interior
En el certamen de reina de belleza de Hispanoamérica celebrado en Sucre (Bolivia), miss Baleares 2008 dijo que Cristobal Colón descubrió América en el año 1980.
Esta señorita tendría que haber sido descalificada en una prueba de cultura, pero en un concurso de belleza no tiene la menor importancia; sólo importa la belleza, y se deberían evitar preguntas comprometedoras que nada tienen que ver con el físico, sino con el intelecto. Las preguntas de cultura, acaso, se tendrían que plantear en un concurso de miss o mister belleza interior.
La respuesta de Melody Mir es divertida, pero algo penosa. Enseguida se piensa en que una mujer hermosa es tonta, lo que es totalmente falso. La chica no es que sea tonta, es ignorante. Hay personas inteligentes incultas como hay personas cultas poco inteligentes. Ser inteligente, culto y hermoso no está al alcance de cualquiera. Sobre la mujer hermosa o sus atributos físicos existen demasiados prejuicios y demasiadas frases hechas de tono machista.
Antonio Nadal Pería/ Zaragoza

Analítica del corrupto
Cuando a un político se le achaca algo inverosímil este no responde, su respuesta es su silencio.
Cuando es verosímil, da una nota de prensa y no se pone al teléfono.
Cuando es creíble, convoca una rueda de prensa y se abstiene de responder a las preguntas de los periodistas.
Cuando es demostrable, lo desmiente por su honor y recibe el apoyo de su partido.
Cuando es la pura evidencia y se siente amenazado por la justicia, vuelve al principio y se calla.
Cuando se demuestra su culpabilidad y termina entre rejas, nadie de su partido conocía nada, sus vecinos lo repudian y sus votantes le atacan.
Para que luego se diga que no es duro ser un político corrupto. Y es que no hay peor enemigo que el que fue amigo del partido.
Pedro José Narváez Benítez y Juan Manuel Canle Durán /Cádiz

El impuesto de sucesiones
El impuesto de sucesiones es objetivamente injusto y debe desaparecer.Así lo ha entendido también Esquerra Republicana de Cataluña.
La igualdad ante la ley obliga a su eliminación total y absoluta por injusto y, por supuesto, para todos los que lo soportan, independentemente de su nivel de renta, ya que lo contrario sería confiscatorio, supondría admitir la aplicación de un impuesto injusto sobre un ciudadano.
Eso no es posible en un Estado de derecho. Es como si el precio del menú de un restaurante o un artículo de consumo variara según la persona que lo comprara. Esto no sería ni lógico ni justo, por lo tanto, basta ya de demagogia barata y populismo de salón.
En el mismo momento en que se declare injusta una ley, esta debe ser eliminada, de lo contrario lloverán los recursos de inconstitucionalidad, puesto que todos los ciudadanos son iguales ante la ley.
Juan ANtonio del Cerro

¿Una idea demasiado simple?
Para remediar en lo posible el paro, ¿no sería hora de empezar a interpretar inteligentemente aquel antiguo eslogan de "trabajemos menos para trabajar todos"?
En vez de compensar a los parados, habría que compensar a las empresas que repartieran el trabajo sosteniendo unos salarios dignos y aplicar esto tanto al sector privado como al público.
Unas encuestas bien planteadas podrían sacar a la luz que muchos trabajadores renunciarían a salarios mayores (y a horas extraordinarias) a cambio de disponer de más tiempo para ellos mismos, para sus familias, sus aficiones...
De ahí saldría una importante bolsa de trabajo para los que ahora no lo tienen.
Mª Socorro Aragón Mena/Burgos

Ampliación de la enseñanza
Cualquier debate que se abra sobre los y las jóvenes, ya sea la ampliación de la enseñanza obligatoria, la edad penal, la mayoría de edad para ejercer su derecho al voto, la decisión sobre su maternidad o paternidad, etcétera, pasa por conocer bien a los jóvenes o, al menos, por establecer unos estándares de conductas mayoritarias que sirvan para tomar decisiones políticas que además puedan ser refrendadas por ellos y homologadas al nivel territorial más amplio (europeo o mundial).
Pero lo que no podemos hacer de ninguna manera es dejarnos llevar en estos asuntos de tanta importancia por globos sonda o por la opinión siempre sesgada de tal o cual personajillo, ya lleve este o esta sotana, pantalón o falda.
Antonio Ortiz Ortiz /Maestro de primaria

El pacto en Educación
El Ministerio de Educación tiene que presentar cuanto antes una hoja de ruta para poner en marcha el pacto en Educación que es, ahora más que nunca, imprescindible.
Hasta ahora sólo ha habido palabras, puesto que cuando hay ocasión de aprobar medidas, el partido del Gobierno se echa para atrás.
Un adolescente que entra en la dinámica del fracaso escolar es un candidato a desarrollar comportamientos perjudiciales para él mismo, para su familia y para toda la sociedad.
Las aulas son un factor determinante para el desarrollo de la personalidad y para la integración en el mercado laboral, una tendencia que se incrementa incluso más en la actual sociedad del conocimiento.
No es suficiente repartir ordenadores si no se ofrece a los jóvenes usuarios un proyecto de vida que suponga una buena preparación académica y unas pautas sensatas de conducta cívica.
En este contexto, conviene resaltar otro dato esencial del informe: el conjunto del gasto público en educación se sitúa en España en el 4,3 por ciento del PIB, muy lejos del 5,2 de media de la Unión Europea.
Sin dejar de reconocer la mejoría, es preferible ser realistas y no alimentar un optimismo voluntarista pero con escaso fundamento.
Jesús Martínez Madrid /Salt (Girona)

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