Fuego amigo

Por unanimidad o una nimiedad

Ayer fue un día raro. Estuvo a punto de ser uno de esos días sin ningún muerto en carretera (algo que sólo ha ocurrido tres veces desde hace once años), aunque en el último momento lo estropeó alguien que odiaba la vida y las estadísticas con final feliz: iba montado en un quad, tomando curvas a toda pastilla y sin casco. Para morirse, vamos.
Ayer también el generalmente Congreso de las putadas y los putados estuvo a punto de aprobar por unanimidad una ley que viene a aliviar el problema de cientos de miles de personas, de vidas hipotecadas por su dedicación casi exclusiva a familiares discapacitados. La Ley de la Dependencia, enriquecida con aportaciones de varios grupos parlamentarios de la oposición, a falta del trámite del Senado, sólo sufrió el voto en contra de quince diputados y la abstención de otro. El motivo ya lo sabéis, no es por tacañería o porque sus disidentes señorías pensaran que es mejor la solución final para los que no pueden valerse por sí mismos: se opusieron los nacionalistas (no todos)... porque invadía competencias de sus pequeñas naciones, que al parecer están por encima de cualquier otra consideración. La aprobación de la ley se quedó a las puertas de la unanimidad por una nimiedad.

Y yo me pregunto, sabiendo que su voto era inútil, inservible como gesto testimonial, mal entendido por la ciudadanía, ¿por qué CiU, PNV, EA y Nafarroa Bai, en vez de disimular, se arriesgan a dejar al desnudo los efectos más indeseables del nacionalismo? ¿Por qué ese empeño estúpido en mostrarnos, en un asunto tan delicado para la sensibilidad de sus compatriotas, la cara más árida del nacionalismo, pura carnaza para los que sabemos, como buenos ateos, que las naciones no existen, que son un invento de sus sacerdotes y sacerdotisas?
El de ayer estuvo a punto de ser un día para recordar, con dos noticias casi redondas, como un paréntesis balsámico entre los capítulos del culebrón de la conspiración del 11-M. El de hoy creo que vendrá con alguna ración de ácido bórico.

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