Modos y Modas

RoboSkin: terror en la ducha

ANUNCIOS ANIMADOS// FERRAN CALVET

Una máquina de afeitar se presta bien a anunciarse recurriendo a alguna escena erótica. Suavidad, delicadeza, finura... De ahí tantos anuncios con tipos de mentón azulado que reciben toda clase de caricias después de haberse afeitado comme il faut. Es de suponer que eso es lo que han intentado al presentar el nuevo sistema de afeitado RoboSkin de Philips pero lo que les ha salido es la más espeluznante escena de ducha desde la secuencia de Psicosis. En vez de sacar a una modelo real, de silicona y hueso, se han inventado una especie de robot-esclavo que se encaja la afeitadora en la mano y se mete en la ducha con el señor de la casa a fin de apurarle el bigote o cualquier otra cosa peluda que tenga. El robot viene a ser un simple C3PO con una chichonera de ciclista encajada en la perola, pero, a fin de erotizarlo un poco, también le han puesto un careto blanco con algo parecido a facciones femeninas.

Y ciertamente queda claro que es un robot hembra (si se fijan verán que hasta tiene dos bolas de petanca incrustadas en el tórax) pero el aire general de psicópata ninja es inequívoco. Sobre todo al final del anuncio, cuando, una vez afeitado el señorito, el robot se lo queda mirando con sus ojos azules e inmóviles y uno no sabe si va a darle un beso con lengua o a partirlo en dos de un katanazo. Desconozco qué opinarán otros varones más jóvenes e intrépidos, pero yo preferiría hacerme las patillas a la cera que meterme en la ducha con semejante criatura.

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