Es una de las receta típicas de Cádiz y Andalucía, un entrante o tapa muy sabroso. Las zanahorias aliñás o aliñadas elevan la clase de esta hortaliza, que es una maravilla nutricional, llena de coloridos carotenos, minerales y vitaminas. El aliño en cuestión las convierte en festín de bar, en aroma de taberna o puerto abierto. Tienen un punto avinagrado y un seductor tono de comino.
Recuerdan, en parte, tal vez por la sencillez de sus materias y la presencia de las especias, a las ensañadas marroquíes, al Mediterráneo más oriental, y seguramente, en su origen, hubo algún intercambio, quién sabe en qué dirección, en el Estrecho que ha sido puente de tantos encuentros.
Básicamente consiste en cocer las zanahorias en su punto exacto (para que luego no se rompan), y aliñarlas con un buen vinagre y un majado con ajos, comino, orégano y sal (aunque también pueden llevar otras hierbas aromáticas, como el perejil). El resultado es un tapa perfecta y saludable, muy veraniega y fresca, completamente vegetariana.
Receta de zanahorias 'aliñás' o aliñadas al estilo de Cádiz
Ingredientes 4 personas:
- 1 kilo de zanahorias.
- 4 dientes de ajo.
- 1 cucharadita de orégano.
- 1 cucharadita de comino.
- 1 cucharadita de pimentón dulce (opcional).
- Vinagre de Jerez (200 ml.).
- Agua.
- Aceite de oliva virgen extra (opcional).
- Sal.
1. Cuece las zanahorias:
Pela las zanahorias y cuécelas en una olla con agua y sal (que las cubra bien), durante unos 12 minutos, que salgan al dente. Reserva el caldo. Deja que se templen y después córtalas en rodajas medianas, de un centímetro de grosor, aproximadamente. Ponlas en una fuente, donde luego las aliñarás.
2. Prepara el aliño:
Pela los dientes ajos y májalos en un mortero junto a una cucharadita de orégano, otra de comino y un poco de sal. Debe quedar bien majado. Puedes añadir también una cucharadita de pimentón dulce. Echa medio vaso de vinagre de Jerez. Mézclalo, liga la salsa, y baña con ellas las zanahorias. Añade un vaso del caldo de cocción de las zanahorias (dos, si lo quieres más suave). Deja que reposen varias horas en la nevera o en un lugar fresco, hasta que las hortalizas tomen el sabor del aliño.
3. Sirve las zanahorias aliñadas:
Sírvelas directamente con su caldo en un plato o fuente, o cuélalo, y riégalas entonces con un buen chorro de aceite de oliva virgen.
➥ Seguimos con una receta de patatas aliñás.
Comentarios
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