Pocos vegetales tienen las propiedades del brócoli. Minerales, antioxidantes, fibra, vitaminas... Pero a veces, a muchos de nosotros, nos cuesta comerlo. Y eso que España es uno de los grandes productores de este vegetal. Convertido en pastel, con una base de huevo y queso, y pasado por el horno, esta verdura gana en presencia y sabor. La unión de estos elementos la favorece, y gusta hasta el más reticente.

Hablamos de una receta sin dificultad alguna pues solo consiste en cocer el brócoli, mezclarlo con cebolla frita, queso, tacos de jamón, y huevos. Se cuaja en el horno, donde se unirán los sabores y aromas. Algunos cocineros también añaden un poco de leche a la base del huevo batido.

Receta de pastel de brócoli

Ingredientes 4 personas:

• 500 gramos de brócoli o un brócoli no muy grande
• 1 cebolla picada.
• Queso mozzarella rallado o cheddar o queso al gusto.
• 100 gr. de tacos de jamón serrano.
• 1-2 dientes de ajo, picados
• 3-4 huevos.
• Aceite de oliva virgen extra.
• Sal y pimienta al gusto.

1. Prepara el brócoli:

Precalienta el horno a 180 °C  y engrasa un molde apto para horno o recipiente redondo donde vayas a cuajar el pastel. Hierve agua en una olla grande y añade sal. Agrega el brócoli (sin su tallo y cortado en ramilletes) y cocínalo durante 5 minutos, o hasta que esté al dente. Luego, escúrrelo y córtalo en trozos más pequeños. Corta el tallo en laminas y cuécelo durante siete minutos (si quieres aprovecharlo). En una sartén, fríe la cebolla y el ajo, cortado en juliana y láminas, y cocínalo hasta que estén tierno y ligeramente dorado.

2. Haz la masa del pastel:

En un recipiente aparte, bate los huevos. Pon el brócoli en el recipiente horno y añade los tacos de jamón, la cebolla, el ajo frito y el queso. Vierte la mezcla de huevos sobre el brócoli en el molde. Asegúrate de que se distribuya uniformemente. Puedes espolvorear pan rallado o más queso sobre la parte superior del pastel para obtener una textura crujiente.

3. Hornea el pastel de brócoli:

Hornea el pastel de brócoli en el horno precalentado durante aproximadamente 25 minutos, o hasta que esté dorado y firme en el centro. Retíralo del horno y deja que el pastel repose durante unos minutos antes de servir. Esto permitirá que se asiente y sea más fácil de cortar.