Todo es posible

Miedo a volar

Por suerte nunca he tenido miedo a volar, al contrario, me gusta viajar por encima de las nubes. Me han convencido de que el avión es el transporte más seguro. Se producen más accidentes ferroviarios y, desde luego, en carretera. Todo eso es verdad, pero somos tan vulnerables que estamos obsesionados con blindar nuestra seguridad tanto en el cielo como en la tierra. Después de una catástrofe área como la del Airbus, se propagan toda clase de rumores alarmantes no sólo por parte de los atemorizados usuarios. También los expertos contribuyen a sembrar el pánico.

No es la primera vez que los pilotos denuncian que el sector de las aerolíneas es tan competitivo que se ven obligados a apurar los márgenes de seguridad en función de la rentabilidad. Tengo archivado un extenso dossier, casi un centenar de páginas, donde los pilotos del SEPLA recogen numerosas carencias e incumplimientos en materia de seguridad en el espacio aéreo español.

En esta ocasión, el sindicato de pilotos de Air France ha pedido a sus asociados que no despeguen mientras la compañía no cambie los sensores de velocidad de los A330 y A340, porque sospechan que han sido una de las posibles causas del accidente producido en el Atlántico en el que murieron 228 personas. El comandante y la tripulación de los vuelos también son víctimas de las arbitrariedades cometidas por las aerolíneas en materia de seguridad. Por su propio interés, el resto de los usuarios conoceremos las causas del accidente. Me interesa mucho la información, porque tengo un viaje próximamente y quiero saber si mi Airbus está en condiciones de volar o será mejor abstenerme.

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