Gunter Grass ha vuelto a entrometerse con Israel apenas unos meses después de escribir un poema en el que denunciaba la potencia nuclear del Estado judío, que en su opinión representa una amenaza para la paz mundial.

Ahora, el premio nobel alemán ha escrito un nuevo poema en el que elogia a Mordejai Vanunu, el israelí que denunció el programa nuclear de su país en 1986, huyó al extranjero, fue detenido por el Mosad en Europa y pasó 18 años en prisión, de los que once años fueron en confinamiento solitario.

En el último poema, titulado "Un héroe de nuestro tiempo", Grass no solo llama a Vanunu "héroe moderno", sino también "modelo", y vuelve a criticar la opción nuclear israelí.

Desde que abandonó la cárcel, Vanunu vive asediado por las fuerzas de seguridad y no se le permite abandonar Israel, como es su deseo.

La publicación del poema coincide con un debate que se desarrolla en Israel acerca de si Alemania se está convirtiendo de nuevo en un país "antisemita".

Ayer mismo, Haaretz publicó una entrevista en la que Stephan Kramer, secretario del Consejo Central de Judíos de Alemania, asegura que el antisemitismo está prendiendo entre los alemanes corrientes y ya no es una cuestión marginal, como lo había sido hasta ahora.

Cuando se le pregunta si se siente amenazado, Kramer responde que durante las 24 horas del día lleva una pistola para protegerse, todos los días de la semana, y que en algún caso, como la semana pasada, ha tenido que mostrar el arma a alemanes que se metían con él en la calle por ser judío.

Kramer dice que ya no confía en los alemanes y que "solo los judíos se pueden salvar a sí mismos", y atribuye el antisemitismo a la "crisis económica" y a la "crisis de identidad" que en su opinión azotan Alemania.