22/01/200922/01/2009

Terroristas
Europa no se reúne con terroristas. A Hamás le pidieron que cumpliera tres condiciones: aceptar el derecho de Israel a tener un Estado, renunciar a la violencia y aceptar los acuerdos firmados por la Autoridad Nacional Palestina. El Estado terrorista en el que se ha convertido Israel hace todo lo que está en su mano para que no sea viable un Estado palestino. Acaba de asesinar a 410 niños y a 104 mujeres, el equivalente a casi tres 11-M, el mayor atentado terrorista sufrido en España. Jamás ha cumplido ninguno de los acuerdos que ha firmado y es el país del mundo que más resoluciones de Naciones Unidas incumple. Acaba de bombardear en tres semanas cuatro establecimientos de la ONU, matando a varios de sus empleados. Sigue anexionándose tierras y condenando a la miseria a
millones de palestinos, y varias ONG lo acusan de crímenes de guerra.
Europa, que no se reúne con terroristas, cenó la otra noche con el primer ministro israelí, Ehud Olmert, entre sonrisas y apretones de manos. Todos sabemos que
sólo Estados Unidos puede frenar a Israel; todos sabemos que Europa no se va a enfrentar a EEUU sólo por la vida de unos cuantos civiles, pero, al menos, podríamos esperar un poco de rubor y decencia. ¿Qué es terrorismo? La RAE dice: "1. Dominación por el terror. 2. Sucesión de actos de violencia para infundir terror". Yo diría: aterrorizar a la población civil mediante asesinatos para obtener fines políticos. ¡Basta de farsas, que parte de estas definiciones no las cumple el Estado de Israel!
Juan Diego Botto

El drama de la inmigración
La desesperación de los inmigrantes surafricanos es tan dramática que prefieren jugarse sus vidas ahogándose en el mar que morir lenta-mente de hambre en sus propios países de origen.
El éxodo de las emigraciones hacia el mundo de la opulencia no arreciará mientras el FMI no invierta para que estos países sean autosuficientes. El hambre en el llamado Tercer Mundo es de tal dimensión que el éxodo de inmigrantes hacia Europa no se parará ni con muros de hormigón ni con alambradas ni, incluso, con los mares enfurecidos del estrecho de Gibraltar, sino con un plan de inversiones en maquinaria productiva para que sean ellos mismos los que cosechen los cereales y elaboren sus propios alimentos.
Joaquín García /Getafe (Madrid)

La necesidad de la autoridad
Por desgracia, en los últimos tiempos proliferan las noticias e informaciones sobre autoridades académicas incapaces de ejercer sus funciones y profesores que sufren ansiedad y depresión ante la imposibilidad de mantener un orden mínimo en sus aulas.
En una edad tan delicada para su formación, los jóvenes tienen que ser conscientes de que el respeto y la

corrección en las formas son exigencias mínimas ante cualquier situación. Además, los padres tienen que contribuir a ello en lugar de ponerse, por lo general, de parte de sus hijos y transmitirles así una falsa sensación de impunidad ante su mal comportamiento.
La cuestión es compleja y exige la contribución de todos, sin demagogia ni retórica vacía. Una cosa es expresar las discrepancias por los cauces establecidos y otra distinta amedrentar a los demás a base de golpes y amenazas.
Con carácter general, lo importante es poner los medios no sólo para sancionar, sino también para prevenir estas conductas, que deben ser atajadas con el objetivo de alcanzar un nivel razonable de convivencia en las escuelas.
Jesús Martínez /Salt (Girona)

Esperanza Aguirre y los servicios secretos
La presidenta inmisericorde de la Comunidad de Madrid, Esperanza Aguirre, desde el mismo día en que accedió a la poltrona vía tamayazo, no ha dejado de ofrecernos indicios de prácticas turbias, argucias rocambolescas y triquiñuelas varias.
Los que llevamos años trabajando para la Comunidad de Madrid atesoramos un enjundioso conocimiento de la capacidad que tiene esta
señora para destrozar los servicios que, en teoría, debería cuidar con sumo celo. Pero en lo único que muestra celo la lideresa es en la lucha por el poder, en atraer focos, en acaparar distinciones y en repartirse entre ella y sus amigos todo tipo de prebendas.
Mario López Sellés /Madrid

Inacción e intranquilidad
Hemos escuchado los malos augurios que vienen de Europa, que antes fueron del Fondo Monetario Internacional y que nunca llegaron desde el Gobierno. El presidente, Rodríguez Zapatero, nos ha invitado a consumir, aunque no ha dicho con qué dinero. La secretaria federal de Organización del PSOE, Leire Pajín, nos decía que esta gente de Europa se equivoca mucho y que hay que hacerle el caso justo. Por último, Pedro Solbes, todavía ministro de Economía, nos dormía mientras decía, sin base científica alguna, que no auguraba una tasa de paro cercana a los cuatro millones de españoles.
Quedarse con los brazos cruzados apelando a la crisis financiera internacional cuando países con la misma problemática –en cuanto a crisis inmobiliaria y financiera, como Gran Bretaña e Irlanda– tienen tasas de desempleo la mitad que la nuestra, y otros sin crisis inmobiliaria –como Austria, Dinamarca y Holanda– están en tasas en torno al 4% (recordemos que España está ya por encima de 12%), indica que poco vamos a avanzar. La crisis es global, pero afecta de forma muy diferente a los países.
Antonio Casterá/Puerto de Sagunto (Valencia)