Cartas de los lectores

07 de abril

María,no eres mi tipo
Todo ocurre igual, coqueteos, ligas, de vez en cuando te lías con ella, pero llega un momento en que la cosa se vuelve seria, te has acostado con ella y la María no aborta, estás obligado a entregarle tu vida, porque luchar contra ella en ese momento es imposible, te acabas casando.
Además, te casas con una piba que no te quiere, que sólo quiere ver cómo le lloras, cómo te desesperas si no la tienes, y se ríe, siempre se ríe en tu propia cara.
Si la dejas con un divorcio, igualmente, tu vida ya está destrozada. Entre ella y el tiempo te destrozarán tu persona, tu cuerpo, pierdes tu capacidad, ni amigos ni seres queridos te importan. Ella te aparta, estabas cegado por su belleza, no sabías negarte... pero, aún así, más vale tarde que nunca. Déjala.
Si no la dejas, llegará un momento en el que la maría enviude –¡ella nunca va a morir!–, y a ella le dará igual, tiene muchos pretendientes y, mientras tú vas a la tumba, ella no derramará una sola lágrima por ti, sólo caerá la lluvia de una vida tormentosa mientras sobre el sepulcro aparece una losa sin nombre. Ella se ríe sentada sobre tu cuerpo, con una risa fría como el hielo. Sería tu último recuerdo si no fuera porque ya estás muerto.
Y todo por no saber decir al principio, cuando todavía estás a tiempo: lo siento, no eres mi tipo. Y tú que me lees, quizás, todavía estás a tiempo.
Manuel Rivas/14 años. Madrid

Bolonia y la Universidad pública
No es gratuito que los ciudadanos se hayan dado cuenta de que no saben casi nada del Plan Bolonia salvo que viene de Europa. Y es que los políticos han escondido el debate, como hacen con tantos otros temas. Por eso, tenemos que agradecer a la minoría de estudiantes que se han manifiestado contra el Plan Bolonia, ya que, gracias a ellos, el tema no se aprobará sin darnos ni cuenta. En resumen, el Plan tiene virtudes (se avanza en el reconocimiento de los títulos a nivel europeo y permite la movilidad de estudiantes y profesores, y también incorpora metodologías didácticas que van más allá de la tradicional clase magistral) y defectos (se anda hacia un modelo anglosajón con carreras más cortas, que perderán valor en el mundo laboral y sólo se valorarán los másteres, que serán privados).
En definitiva, pienso que los beneficios del Plan Bolonia no son suficientes, puesto que son medidas que se podrían adoptar al margen de si se acepta el conjunto del Plan o no. Y, en cambio, aceptar todo lo que implica Bolonia contiene peligros inquietantes. Hemos visto mejorar la democracia al permitir que las capas sociales desfavorecidas pudieran acceder al máximo nivel educativo, pero estamos a punto de desandar el camino al desvalorar la universidad generalista y encaminarnos hacia un modelo elitista en el que los más ricos tendrán todavía más ventajas.

Jordi Oriola i Folch/Barcelona

Intolerancia terminal
El hecho de que una profesora de Bioética de una universidad católica alicantina haya definido como "enfermos" a los homosexuales y bisexuales nos da la medida de los turbulentos tiempos ideológicos que vivimos. Como recién salida de un tribunal inquisitorial, Gloria Tomás y Garrido utiliza su cátedra para convertir una opción sexual personal en una desviación sociopatológica.
Enrocada en el oscurantismo y la intolerancia que predica su credo, exige a los gays que antepongan la dignidad a la libertad. Pero ¿de qué dignidad habla esta señora, de la que, en virtud de una religión que sataniza las diferencias, nos ha dado innumerables muestras de la hipocresía y el doble rasero que utilizan para ellos mismos?
Ese miedo a la libertad, porque sólo el miedo y la ignorancia pueden mover a pronunciarse en estos términos, transforma a estos homófobos fundamentalistas en verdaderos enfermos terminales que, lejos de pedir a su Dios una cura para este mal, prefieren expandirlo infectando de odio e irracionalidad todo cuanto tocan. La Iglesia católica, en unos momentos en los que el paro y la exclusión social golpean con dureza a la población, ha preferido lanzar una persecución contra los homosexuales sin prestar atención a sus propias filas, entre las que proliferan pederastas y otros comportamientos punibles.
Ana Cuevas/Zaragoza

España y la matanza de focas
Durante años y años, Canadá ha cazado de forma cruel e inhumana a millones de focas, principalmente por su piel. Este año se ha autorizado la matanza de alrededor de 300.000 ejemplares. En la mayoría de las ocasiones, los cazadores despellejan vivas a las focas sin respetar las normas mínimas establecidas por las organizaciones internacionales para evitar su sufrimiento. La crueldad de esta matanza ha generado el rechazo de millones de personas en todo el mundo.
El pasado 27 de marzo, la Unión Europea se reunió para debatir la prohibición de la venta de los derivados de las focas en Europa. El resultado final ha sido a favor de la prohibición total. España se unió a la mayoría y votó también a favor de la prohibición total del comercio de productos de foca. Su postura, por encima de cualquier otro tipo de interés, me ha sorprendido muy gratamente.
Espero que esta decisión contribuya a proteger también a otros animales contra el maltrato al que están sometidos dentro y fuera de nuestras fronteras. Esta decisión anima a muchos ciudadanos sensibilizados a no perder la esperanza en un mundo cada vez mas deshumanizado.
Mª Pilar García/Zaragoza

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