La mouclade es una receta de mejillones francesa. Se sirven con una salsa espesa, tipo velouté (un roux de mantequilla con harina), que suele hacerse con el jugo de los mejillones, nata, y vino blanco o sidra. Lleva también un punto de azafrán y algunos cocineros le agregan curry (entonces, toma un colorido tono amarillo).

El único secreto de esta receta es conseguir ligar bien la salsa, que tenga la textura apropiada (como si hicieras un bechamel). También es importante que los mejillones no salgan demasiado cocidos (apenas unos cuatro minutos de cocción). Una vez hecha la salsa, sirve los mejillones abiertos y bien cubiertos por ella.

Mouclade

Ingredientes 4 personas:

• 1,5 kg de mejillones frescos, limpios y sin barbas
• 6 chalotas o cebollas francesas pequeñas, picadas
• 3 dientes de ajo, picados
• 1 vaso de vino blanco seco o sidra de manzana
• 1 taza de nata o crema
• 1-2 cucharaditas de curry en polvo
• 2 cucharadas de mantequilla
• 10 hebras de azafrán
• 1 yema de huevo
• 2 cucharadas de harina
• Sal y pimienta al gusto
• Perejil fresco picado para decorar (opcional)

Prepara los mejillones:

1. En una olla grande, derrite la mantequilla a fuego medio. Agrega la mitad de las chalotas picadas y el ajo, y cocínalos hasta que estén suaves y translúcidos, aproximadamente 5 minutos.
2. Agrega el vino blanco a la olla y lleva a ebullición. Cocina durante unos minutos para que el alcohol se evapore un poco.
3. Agrega los mejillones limpios a la olla y cubre con una tapa. Cocina los mejillones durante unos 3-4 minutos, agitando un poco la olla, hasta que todos los mejillones se hayan abierto. Desecha cualquier mejillón que no se haya abierto.
4. Retira los mejillones cocidos de la olla y colócalos en un recipiente grande, reservando el caldo.

Haz la velouté con la salsa de los mejillones:

1. Cuela la salsa de los mejillones y echa en ellas varias hebras de azafrán, para que se infusione.
2. En una sartén u olla pequeña diluye una nuez generosa de mantequilla. Echa el resto de las chalotas y cocínalas a fuego bajo hasta que estén traslúcidas y tiernas.
3. Agrega luego varias cucharadas de harina, y espera a que se cocine un poco.
4. Agrega el curry en polvo y añade poco a poco la salsa de los mejillones que tenías con el azafrán. Remueve hasta que se forme una especie de bechamel, algo espesa.
5. En un bol pequeño mezcla una yema de huevo con un vasito de nata para cocinar. Mézclalo bien. Agrégalo a la salsa ya fuera del fuego, pero aún caliente.
6. Sazona la salsa con sal y pimienta al gusto (piensa que los mejillones ya llevan algo de sal).
7. Vierte la salsa caliente sobre los mejillones abiertos y servidos en una fuente. Espolvorea perejil picado.