Todo es posible

¡Ánimo! Ya queda menos

Estoy rodeada de gente que vive en vilo, resiste a duras penas y aguanta como puede el chaparrón. Es difícil no caer cuando todo cae, decía el poeta, y, entre otras muchas cosas, ha vuelto a caer el empleo o, lo que es lo mismo, el paro ha afectado a 82.132 personas más en febrero, así que ya hemos alcanzado la cifra récord de desempleo desde 1996. Y, para colmo de males, la primera causa externa de defunción en España es el suicidio.

Podía seguir buscando motivos para la desmoralización, pero lo que necesitamos es, precisamente, todo lo contrario, que nos den ánimos. Y lo más animoso que he encontrado es el mensaje que el presidente de Telefónica, César Alierta, ha lanzado desde Alemania: "Lo peor ya ha pasado y ahora es el momento de construir la prosperidad futura de los negocios y de los ciudadanos". A él, desde luego, no le ha ido nada mal. La sección alemana de la multinacional ha sido elegida por el Instituto Great Place to Work "la mejor empresa para trabajar". Para celebrarlo, César Alierta invitó a la canciller Angela Merkel y al presidente José Luis Rodríguez Zapatero al estand de Telefónica en la feria de las altas tecnologías que estos días se celebra en Hannover. Dirán que me agarro a un clavo ardiendo, pero no es fácil encontrar noticias reconfortantes esta semana, al margen del optimismo desbordante de la alpinista Edurne Pasabán, que viaja mañana hacia el Himalaya con el objetivo de conquistar la cima del Shisa Pangman y el Anapurna (¡ojalá lo logre!), y de la sorprendente campaña publicitaria de autoestima emprendida por el Consejo Superior de Cámaras de Comercio, estosololoarreglamosentretodos.org, que no acaba de arrancar.

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