07/02/201007/02/2010

La edad de jubilación
La reciente propuesta de aumentar la edad de jubilación dos años más ha causado en la población un descontento general.
Y es que, muy posiblemente, en su afán de reforzar la credibilidad de nuestra maltrecha economía nacional, parecen haber apostado por prorrogar la vida laboral del trabajador.
Además –aduce la ministra del ramo– se preservaría a largo plazo el actual sistema de pensiones, que se encuentra en entredicho.
Lo único que verdaderamente se ha conseguido hasta ahora ha sido el monumental rechazo, tanto por parte de los mayores como de los jóvenes, que consideran que se va contra los derechos de los trabajadores.
Bien complicado resulta intentar rebajar esa sangrante cifra de paro, que tristemente ya supera los cuatro millones, teniendo que alargar los parados aún más su tiempo de caza y captura de trabajo, que a este paso va a durarles casi hasta la edad de retiro. Genialidades políticas.
Mar Ramos / Zaragoza

El tijeretazo que viene afecta a los de siempre: a los trabajadores
La reducción de 50.000 millones de euros en gasto público supone una vuelta de tuerca más al Estado de bienestar que hemos logrado los ciudadanos españoles en los últimos 30 años. Por otro lado, se nos anuncia una reforma laboral que incluirá el aumento de la edad de jubilación y el abaratamiento del despido; todo ello después de que cuando España tuvo un gran crecimiento económico los salarios subieron bajo mínimos.
Es un mal llamado plan de austeridad, pues desde la administración central no se plantea la reducción de publicidad institucional, de asesores, de coches oficiales, o la supresión de ministerios como el de Vivienda, tan poco efectivo, o de alguna Vicepresidencia. Por no hablar de las comunidades autónomas. Ahí está Madrid dándose autobombo publicitario cada vez que concluye una obra de Metro; o Catalunya, con previsión de abrir 35 consulados por todo el mundo. Al menos, el documento abre una puerta a la esperanza al barajar "la posibilidad de suprimir organismos que supongan una reducción de gasto real", pero eso ahora no toca: ahora lo que corresponde es que los trabajadores se aprieten una vez más –y van unas cuantas seguidas– el cinturón.
Manuel Cañedo Gago / Madrid

La jornada partida es un error: habría que adaptar los horarios
En muchos países del mundo, los obreros y los escolares salen de sus casas una vez al día para hacer su jornada, y al acabarla vuelven también una sola vez al día. Es así en todo el mundo menos en España.
Y ahora, afectados por una crisis mundial que amenaza nuestra seguridad, seguimos testarudamente gastando el doble de energía a causa de esa costumbre de la jornada partida, y encima produciendo menos.
Richard M. Mcbride / Valencia

La respuesta de IU y los sindicatos a la propuesta del Gobierno
La amenaza de los dos principales sindicatos y de IU de convocar una huelga general si el proyecto de prolongación de la vida laboral sigue adelante es lo mismo que si, en medio de una guerra, los defensores de una posición amenazan con atacarla si el enemigo la toma. Esto parece más bien de la "guerra de Gila", porque en una guerra real, lo que hay que impedir es que el enemigo la tome.
Pero como en nuestro castigado país ha sido abolida la lucha de clases (sólo del lenguaje, naturalmente), no se pueden hacer comparaciones de ese tipo, usando las malsonantes palabras "amigo" y "enemigo", ni siquiera en las filas de IU, a lo que parece. Y si a un enemigo como Díaz Ferrán se le admite como interlocutor para arreglar el país, no hacen falta más comentarios: apaga y vámonos.
Antonio Doctor Romero / Zaragoza

Los efectos ‘colaterales’ de pillar a Aguirre ‘in fraganti’
Los micrófonos indiscretos revelaron la evidente afinidad de la derecha más recalcitrante con IU. ¿Por qué ya no me sorprende que Esperanza Aguirre prefiera darle a IU un consejero en Caja Madrid quitándoselo a Gallardón?
Se reeditan viejas costumbres: los coqueteos de Anguita con Aznar no fueron una rareza histórica; ciertos partidos que se autodefinen de izquierdas sólo han sabido sacar tajada electoral cuando le han dado un bocado al PSOE en horas bajas, sirviéndole en bandeja de plata el Gobierno al PP.
El señor Cayo Lara aprovecha cualquier resquicio para el desgaste. Eso sí, sin proponer una sola alternativa.
Pero echamos de menos una aclaración por ese puesto de consejero de Caja Madrid y cuál será su coste.

Señor Lara, algunos podríamos pensar que puede ser el pago adelantado por mantener la pinza.
Al fin y al cabo siempre hemos visto a Izquierda Unida más satisfecha en la oposición cuando gobernaba el PP, ¿por qué será?
Francisco Javier España / Galapagar (Madrid)

Cadena perpetua: ¿convicción o propuesta oportunista?
No estaría mal que los políticos que reclaman la implantación de la cadena perpetua en España como una posible solución para alcanzar mayores cuotas de justicia, protección y seguridad ciudadana abandonaran el discurso de la ambigüedad y fueran más explícitos.
¿Sería una condena revisable en el tiempo?
¿A qué tipo de delitos podría aplicarse?
Curiosamente, atendiendo a las últimas encuestas del Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS), la clase política está entre las principales inquietudes de los españoles, es decir, sería incomprensible que la corrupción o el desfalco de las arcas públicas quedaran exentos de semejante condena.
Si la demanda se sustenta en la convicción y no se trata de una propuesta oportunista lanzada al calor del lógico enojo social que producen ciertos casos, ¿por qué no la introducen en el programa electoral del partido?
Coherencia, o mejor no crear confusión jugando con las palabras.
Alejandro Prieto Orviz / Gijón (Asturias)

China, Barack Obama y la posible visita al Dalai Lama
La República Popular China constituye El Dorado para muchas empresas occidentales. Ahí encuentran no sólo mano de obra barata hasta el extremo, sino también un mercado de clase media-alta cercano a los 300 millones de personas.
¿Quién arriesgaría todos esos beneficios por solidarizarse con el líder tibetano Dalai Lama? Pues la respuesta seguramente es que nadie, excepto Barack Obama, si finalmente no cede.
China es una dictadura, los beneficios de las empresas se logran gracias a una mano de obra que vive en unas condiciones penosas y a la larga, de una forma u otra, acaba vendiendo productos que en origen se llevaron de Europa o América como made in China por el bajo coste de su mano de obra.
La actual relación será perjudicial a la larga, Taiwan es una república demócratica que vive bajo el miedo de ser invadida por China. Occidente no hará nada, miraremos a otro lado y dejaremos que autodenominados expertos en Derecho Internacional nos expliquen con verborrea jurídica cómo lo correcto es permitirlo. Para establecer una relación de amistad duradera hay que poner límites, y estos empiezan, antes de nada, por no renunciar a nuestro modo de vida, la democracia y la defensa de los Derechos Humanos.
Jorge Ipiña Pando / Bilbao

Haití y la solidaridad que no llegó antes del seísmo
Todo terminará cuando a los medios de comunicación les deje de interesar. Nadie era solidario con Haití cuando esas cerca de 150.000 personas estaban vivas. No nos importaba que viviesen en el país más pobre de Latinoamérica y uno de los más pobres del mundo. Tampoco nos importaba que hace 15 años fuera exportador de arroz, y que debido a los préstamos que pidió al FMI tuviese que convertirse en importador, ni que su población rural emigrase a Puerto Príncipe: la ciudad que se les cayó encima.
No nos importaba entonces ni nos importa ahora. Nuestra mal llamada solidaridad no es más que el bálsamo de nuestras doloridas conciencias, dependientes del capitalismo que ahoga a los que hoy o mañana nos dan pena y de nuestro occidental sentido de culpabilidad. Y es que con Haití la caridad es útil y la solidaridad necesaria. Pero la Justicia es fundamental.
Alejandro Aparicio Díaz

La otra realidad de Haití y la ayuda de 400 médicos cubanos
Antes de que el mundo con este terremoto confirmara la existencia de la miseria en Haití, había 400 médicos cubanos cooperantes en la isla que constituían la columna vertebral del sistema sanitario haitiano y que despues han sido reforzados por más sanitarios cubanos que han llevado a cabo una parte muy importante de las intervenciones quirúrgicas practicadas en el país.
De eso no se ha hablado en muchos medios de comunicación, muy selectivos en sus noticias según el país del que se trate.
Emilio González López