Balagán

Erre que erre

No pasa un día sin que Israel lance a sus polítícos y militares contra Irán. Una de las especialidades de los dirigentes hebreos, muy utilizada en los últimos meses, es comparar Irán con el nazismo y con los campos de concentración. Es un tema favorito de Netanyahu, así que no puede estrañar que en su último discurso sobre el Holocausto, el primer ministro haya empleado las tres cuartas partes del tiempo de que disponía a atacar a Irán, vinculando a los iraníes con los nazis.

La comparación es disparatada aunque es evidente que su repetición hasta la saciedad por parte de los dirigentes israelíes y por los lobbies pro-israelíes americanos y europeos, está haciendo mella en Estados Unidos y Europa.

En las últimas semanas los israelíes han denunciado la política de Barack Obama con respecto a Irán. La consideran demasiado débil y condescendiente. A ellos les gustaría mano dura y ataques contra las plantas nucleares iraníes, y ya mismo, sin esperar un minuto más.

Desde el punto de vista de cualquier observador curioso, se abre un periodo muy interesante en el que se verá si la presión de Israel sobre Obama es suficiente como para provocar una confrontación militar entre Estados Unidos e Irán antes de las elecciones americanas.

Netanyahu se ha marcado como referencia las elecciones americanas, que están a la vuelta de la esquina, pues se celebrarán en noviembre. Será muy interesante ver si Obama acaba doblegándose a esa presión o consigue mantener a distancia a los lobbies.

Más Noticias