Cartas de los lectores

24 de marzo

Predicar con el ejemplo
Establecer una relación directa entre la Iglesia y las agresiones o abusos sexuales hacia menores que han cometido en diversas partes del mundo curas pederastas es erróneo e injusto, pues no se puede estigmatizar a toda una organización o colectivo debido a las acciones llevadas a cabo por algunos de sus miembros. Pero ¿es acertado y admisible soslayar, minimizar u ocultar hechos despreciables y aberrantes?
Mantener posiciones corporativistas con el fin de disculpar, abrigar o defender a quienes mantienen comportamientos delictivos, desatendiendo o ignorando a las víctimas, ¿aporta algún beneficio a la sociedad o al propio grupo?
Para cultivar la autoridad moral, la confianza y el prestigio es imprescindible predicar con el ejemplo.
Alejandro Prieto Orviz / Gijón (Asturias)

Sobre los últimos casos de pederastia

Se me ha ocurrido una buena idea para conseguir que, de una vez por todas, el clero colabore en el esclarecimiento y castigo de los casos de pederastia cometidos en sus congregaciones.
Aunque, en realidad, no se me ha ocurrido a mí. Más bien se la he cogido prestada a ellos. Es una práctica muy usual en los colegios religiosos, especialmente en los internados: cuando los curas detectan una infracción castigan a todos los alumnos hasta que se descubre al autor de la misma.
Lo que yo propongo es, siguiendo sus magistrales enseñanzas, que se dicte una orden de alejamiento para todo el clero que garantice que ningún cura se pueda aproximar a menos de 50 metros de los niños hasta que concluyan las pertinentes investigaciones, se aclaren todos los casos de pederastia y se depuren todas las responsabilidades habidas, desde las del abusador hasta las de todos y cada uno de los eclesiásticos que consintieron o encubrieron los delitos, incluido el rey de Roma, al que el propio Jesucristo ordenó hace siglos que sirviera al César, pues su reino no es de este mundo.
Mario López Sellés / Madrid

¿Debería dimitir el Papa por los casos de abusos?
La credibilidad de la Iglesia (y de su mensaje) está erosionándose por los abusos a niños.
La mancha de aceite que empezó como un caso lejano en Boston (EEUU) y que se tapó con indemnizaciones a cargo del presupuesto eclesial se ha extendido con virulencia por la católica Irlanda y otros países, incluido el nuestro.
Inicialmente, la reacción de la cúpula eclesial fue muy tibia, hasta llegar a un lacónico mea culpa que no contenta a las víctimas, que ven cómo sus verdugos siguen en el clero.
Dado que el mismísimo hermano del Papa está implicado –por acción u omisión– en casos de malos tratos, ¿debería dimitir el Pontífice por su conocimiento callado de la podredumbre que existía (y existe) en la Iglesia?

Su conocimiento probado de la situación lo sitúa lejos del mensaje principal de su organización, ya que todo aquel que tenga un mínimo de humanidad debe denunciar judicialmente cualquier conocimiento de pederastia que ocurra en su entorno. Me descorazona que los fieles, que tanto salen a las calles para defender a la familia, no clamen al cielo por poner fin –penalmente– a estos delincuentes.
Emilio Iglesias Delgado / Sevilla

La lupa puesta sobre lo que ocurre en Cuba
Ya sé que no es políticamente correcto hacer de embajador del sistema cubano, pero tengo algunas preguntas sin respuesta: ¿por qué nunca se invita a ningún debate sobre Cuba a algún defensor (preparado con argumentos) que ofrezca otro punto de vista, aunque no se esté de acuerdo con él?
¿Por qué se pone la lupa sobre Cuba para encontrar y aumentar cualquier error que allí se cometa y se descuidan otros territorios en los que se cometen violaciones de los derechos humanos? (Y pongo como ejemplos los casos de Sáhara, Palestina, Congo...).
¿Por qué no se hace un reportaje sobre qué sistema electoral es más representativo y participativo, el español o el cubano?
Fernando Sancho

Los imputados del ‘caso Gürtel’ y la pasión de Semana Santa
El juez del Tribunal Superior de Justicia de Madrid Antonio Pedreira ha anunciado que, si las circunstancias no lo impiden, resucitará la trama Gürtel el lunes después de Semana Santa. Si ocurre así, será entonces cuando los imputados entren en tiempos de Pasión. Estemos atentos, porque veremos en los medios a algunos de los presuntos ir en vía crucis a las sedes populares buscando consuelo a su calvario. De allí, unos saldrán tocando la carraca y otros con coronas de espinas, si no crucificados. Habrá quien clame al cielo por tener que comerse él solo el hornazo correspondiente y quien se acuerde de su Judas particular.
Y, entre tanto capuchino, quizá también surja aquel que no está dispuesto a ser el único costalero que cargue con el paso procesional adjudicado y amenace con delatar a los que siguen comiendo torrijas entre el público, tan ricamente. ¿Acabará esto como el rosario de la aurora?
Enrique Chicote Serna / Arganda del Rey (Madrid)

La subida del precio de la gasolina
Desde principios de año, el precio de la gasolina y del gasoil no dejan de subir a pesar de que, ni el precio del petróleo sube, ni los impuestos que afectan a los combustibles se han incrementado. ¿Cuál es la razón, pues, de tal incremento sostenido?
Todo indica que existe un pacto entre las gasolineras para aumentar gradualmente los precios y compensar la caída de la demanda. Los precios de los combustibles deberían estar sometidos a control público, y las subidas autorizadas por la Administración.
Francisca Sánchez Pi / Estepona (Málaga)

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