Cartas de los lectores

3 de junio

Lo que faltaba: el euribor
Vista la evolución del euribor y las previsiones para los próximos meses, un gran número de familias acabarán rezando de cara a la entidad bancaria, pidiendo poder hacerse cargo de los recibos en la siguiente revisión de la hipoteca. Mal asunto que el incremento de los intereses anuales pueda comerse la nómina de un mes de muchos trabajadores, pues no sólo pondrá en serias dificultades la maltrecha economía de los hogares, incluso llegando a perder la vivienda, sino que repercutirá negativamente en el consumo y en la creación de empleo. Y ante semejante contexto, las noticias dicen que los españoles, junto a italianos y griegos, representan el 50% de los compradores europeos de propiedades cuyo valor supera los 17 millones de euros. Con el panorama observado y los tiempos que se avecinan, ¿qué evolución mantendrá la atmósfera de indignación social del presente?
Alejandro Prieto Orviz / Gijón (Asturias)

Preocupación por la salida
de la línea de meta de Rubalcaba
Ya está el vicepresidente y exatleta Alfredo Pérez Rubalcaba dispuesto a realizar la carrera política a diez meses vista que lo lleve al relevo del presidente del Gobierno. Nadie le discute dotes de mando, temple, oratoria e inteligencia. Pero algunos creen que seguir confiando en él ha pasado a ser una mezcla entre razón de fe y desesperación.
Porque si pretende –como dice– seguir fielmente las medidas iniciadas, que han resultado ser un fracaso, la cosa raya en lo inaudito. Y si piensa –como asegura también– aplicar una serie de recetas imprescindibles, pienso que podría aplicarlas ya, porque si no la cosa roza en lo increíble.
Además, tan corresponsable es –como el resto de los políticos de su partido– de rebajar salarios, congelar pensiones, subir la edad de jubilación y el resto de regalos envenenados que nos han ido haciendo a lo largo de la legislatura.
Y es que, pese a que sus votantes le aplaudan hasta con las orejas, la desconfianza, una vez instalada, suele ser, ¡carástolis!, difícil de desterrar.
Miguel Sánchez Trasobares
Zaragoza

Por favor, que el PP no empiece dando la espalda a los ciudadanos
He leído con mucha preocupación, pero no con sorpresa, que el PP quiere boicotear el Consejo Territorial de Sanidad. ¿Es esta la nueva política que van a llevar a cabo en todas la autonomías donde han ganado las elecciones? Soy una persona mayor que sigue con preocupación los temas que me atañen directamente, como la sanidad, la dependencia y también la tramitación de la Ley de Muerte Digna, que muchos grupos ultracatólicos afines al PP quieren boicotear. Para los ciudadanos son muy importantes los temas que se tratan en los consejos territoriales, por eso no entiendo la postura del PP, que piensa siempre más en llegar al poder que en los ciudadanos.
Vamos a asistir a numerosos asuntos donde el PP dará la espalda a los ciudadanos a favor de sus intereses políticos. Ya se ha visto con el asunto de los pepinos: en lugar de apoyar a los agricultores españoles, ha criticado, como siempre, al Gobierno.
Nosotros, los mayores, necesitamos estas leyes referentes a la sanidad, a la dependencia y ahora también a la muerte digna. Son temas importantes de los que depende nuestro bie-

nestar social. No podemos permitir que nadie lo boicotee y se vaya al garete por unos políticos que sólo piensan en llegar al poder. Señores del PP, piensen en España y, en este caso, también en los mayores.
Antonio Gamallo
Madrid

La descomposición de la dignidad social
El llamado movimiento de base de los indignados del 15-M, que bebe de las fuentes ideológicas del libro Indignaos, del autor franco-alemán de 93 años Stéphane Hessel, está marcando la agenda mediática de la actualidad; aunque, en mi opinión, la aparición de este grupo también expresa un espectacular grito de desesperación social contra la descomposición de la justicia social y, al mismo tiempo, contra el triunfo absoluto del maquiavelismo antisocial y del mercantilismo más salvaje e irracional.
No hay duda de que, por ejemplo, los resultados de las elecciones municipales ponen de manifiesto que, en tiempos de crisis, en tiempos muy duros para la lírica, los conservadores (la derecha en general) sabe moverse mucho mejor que las llamadas izquierdas. Y más cuando estas izquierdas practican políticas ultraliberales y terriblemente injustas. Esto provoca una fuerte desmovilización de las clases más modestas y, al mismo tiempo, una indignación en mayúsculas de los sectores progresistas más informados.
Josep M. Loste
Portbou (Girona)

Por supuesto que Barcelona
no debería parecer Vietnam
Debido a la continuada presencia de helicópteros en los alrededores de la plaza Catalunya en prevención de incidentes durante el pasado fin de semana, muchos de los vecinos de la zona no pudimos dormir ni tener una existencia en paz en medio del ruido ensordecedor de los aparatos aéreos, que el viernes empezaron antes de las siete de la mañana y el sábado se alargaron hasta pasadas las cuatro.
En conseller de Interior debería ser consciente de que la plaza de Catalunya es una zona muy poblada de la ciudad antigua y, por supuesto, debería saber que aquello no es la selva de Vietnam a su disposición para jugar a general de sus ejércitos.
Por cierto, el citado señor ni siquiera se ha molestado en personarse en la zona de la acampada de los indignados ni antes ni después de ordenar sus cargas aéreas y terrestres.
Albert Domenech
Barcelona

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