La berenjena rellena de atún es la hermana más saludable de la rellena de carne, y sin restar un ápice de sabor. Dicha verdura y el atún pueden parecer en principio elementos opuestos: un fruto comestible del género de las solanáceas, y de cultivo antiquísimo, y ese pescado orondo y vibrante de la cuenca mediterránea. Pero en esta receta la combinación logra que el mar y la montaña se encuentren con la misma gracia telúrica que la Costa Brava.

Tiene además un toque infantil, cierta reminiscencia de empanadilla por el relleno. Es una de esas recetas divertidas, elaboradas, nutritivas, y perfectas para un día de fiesta. Las berenjenas están terminando ya su temporada, así que date prisa en hacerlas. El tiempo de elaboración es de 1 hora. El nivel de disfrute muy alto. El beneficio nutricional, magnífico.

Receta de berenjenas rellenas de atún y huevo duro

Ingredientes 2 personas:

• 2 berenjenas negras.
• 2 latas de atún en aceite de oliva.
• 1 cebolla.
• 1 pimiento rojo pequeño o 1 verde.
• 2 huevos cocidos.
• 200 gr. de tomate frito (si es ecológico, mejor).

Elaboración:

La receta de berenjenas rellenas de atún consiste en hornear primero las verduras, y después con delicadeza extraer la pulpa. Esta se añade en el sofrito junto a los huevos duros, salsa con la que crearemos el relleno. Después se introduce de nuevo el resultado en las pieles de las berenjenas que habremos reservado, para hornearlo todo junto con un poco de queso. Es una receta muy primaveral, que también engancha con el otoño.

1. Corta como un samurái las berenjenas:

Lava las verduras. Con un cuchillo afilado parte las berenjenas, en dos mitades exactas. Déjalas sin el rabo. Con cuidado, debes hacerle además cortes en su carne blanca. Esto ayudará tanto a la cocción de la berenjena en el horno como para después extraer la carne para el sofrito. Los cortes deben reseguir la línea entre la pulpa y la piel, y luego otros profundos y transversales en el interior, como creando daditos. Vigila que no se agujeree la piel negra, pues la necesitarás después para contener el relleno. Échales pon encima un chorrito de aceite.

2. Hornea la verdura:

Pon en una bandeja las berenjenas y hornéalas. Precalienta antes el aparato a una temperatura de 180 grados. Deben estar al calor durante unos 20 minutos. Mientras tanto, cuece los dos huevos duros. Necesitarán hervirse en abundante agua durante unos 10 minutos.

3. Prepara el sofrito:

El sofrito será la base del relleno. Pica la cebolla y el pimiento rojo o verde, y fríelos con un chorro de aceite de oliva virgen. Puedes añadirle un diente de ajo cortado en láminas, aunque es opcional.

4. Saca la carne de la berenjena:

Cuando las berenjenas estén lo suficientemente hechas como para sacar su carne con facilidad, extrae cuidadosamente la pulpa y añádela bien picada al sofrito. Rehógalo todo junto. Súmale entonces el atún, sin su aceite. También la salsa de tomate. Remueve. Recuerda haber reservado las pieles.

5. Añade los huevos:

Pela los huevos cocidos y pícalos en trocitos. Añádelos al sofrito. Que se cocinen durante unos minutos y que no se desintegren por la salsa. Si te gusta especiado, puedes echarle una pizca de pimienta y orégano. Sálalo.

6. Monta las berenjenas rellenas de atún y huevo:

Esta es la parte que dota de sentido al plato. Cuidadosamente, debes volver a depositar el relleno dentro de la piel de las berenjenas. Si has realizado bien los cortes y extraído con cuidado la pulpa, no debería haber ningún problema. Llénalas bien, como si las resucitaras con su nueva carne.

7. Un poco de queso y de nuevo al horno:

Paso final. Añade en su superficie un queso con carácter o especial para el gratinado. En algunas recetas le ponen un poco de bechamel (se hace una salsa espesa rápida con leche, aceite de oliva y harina, con una pizquita de nuez moscada), cubriendo la superficie del relleno. Que se doren en el horno 1/4 de hora. Servir caliente.

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