Cartas de los lectores

13 de junio

Pepinazo económico
Lamento que la insensatez y precipitación de ciertos burócratas germanos haya provocado una alarma social falsa hacia los productos agrícolas españoles con el consecuente daño para un sector clave de nuestra maltrecha economía. Me pregunto qué hubiese ocurrido si en base a la misma insensatez y deslealtad el Gobierno español se hubiese saltado a la brava los protocolos y hubiese recomendado unilateralmente no consumir por precaución alimentos alemanes, creando una infundada alarma social hacia estos bienes con el consecuente perjuicio para miles de inocentes productores teutones.
A la vista de las gravísimas consecuencias encadenadas imagino que un país amigo, que es además la primera potencia económica de la UE, habrá pensado en cómo compensar a un estigmatizado sector agrícola por una acusación errónea e injusta, responsable del descalabro económico de miles de honestos agricultores.
Martí Gassiot Garriga / Barcelona

La comprensión no sólo tiene
un límite; también tiene un precio
Hace un año Alemania exportó el rumor de que España estaba negociando con la Unión Europea un rescate financiero de 280.000 millones de euros, un rumor que nos costó, en 44 días, nada más y nada menos que 26.000 millones.
Hace una semana, Alemania acusó a España de exportar, a través de nuestros pepinos, la bacteria que ha provocado decenas de muertos y miles de infectados en su país, una acusación falsa que nos ha costado el cierre de varios mercados extranjeros a nuestras hortalizas, pérdidas multimillonarias en el sector agrícola español y una desconfianza hacia nuestros productos imposible de cuantificar.
La ministra alemana de Agricultura y Defensa del Consumidor ha pedido a los españoles que comprendamos la actuación de las autoridades de su país en la crisis del E.coli. A la vista de los hechos le diría a la señora ministra que nuestra comprensión no sólo tiene un límite, sino también un precio: el mismo que nos han costado todos sus rumores.
Alberto Ríos Mosteiro
Madrid

Vaya ideas las de Mariano Rajoy... y vaya consejeros
Cada vez que Mariano Rajoy habla, sube el pan. Rajoy indica que su primera medida al llegar a la Moncloa será fijar por ley un techo de gasto y endeudamiento. Si no recuerdo mal, ya realizó esta propuesta en el Congreso de los Diputados, propuesta que fue rechazada por todos los grupos parlamentarios. Debido a ella, además, fue acusado de demagogo, porque la Comunidad de Murcia es de las que tienen más déficit, la Comunidad Valenciana es de las más endeudadas y el Ayuntamiento de Madrid bate récords europeos de endeudamiento, comunidades todas gobernadas por el PP.

Yo creo que Rajoy gana votos estando callado, ya que cada vez que habla nos envía unas propuestas que cualquier persona que razone tiene que quedarse alucinado. Predica y no se da cuenta de que lo que propone es lo contrario de lo que pasa en los territorios gobernados por el PP. O no tiene buenos consejeros, o estos le dejan estrellarse.
Consuelo Gonza
Madrid

Del Canal de Isabel II
y la credulidad
Imagínense que, a mediados del siglo XIX, las necesidades de una noble villa hicieran necesario crear una infraestructura para dotar a sus ciudadanos de un elemento tan vital como el agua. Imagínense que en esa villa el agua fuese de una excepcional calidad y que, además, para todo ello se crease una organización, una empresa, que gestionase todo lo relacionado con ello: sus embalses, sus bosques aledaños de alto valor cinegético y ecológico, sus acueductos... Imagínense, además, que la buena gestión de un bien común como es el agua que cae del cielo hiciese que esa organización, que esa empresa, obtuviese grandes beneficios, y que estos se reinvirtieran con muy buen criterio en fines de interés para la comunidad, comunidad por otra parte a la que pertenece por sentido (y derecho) común el agua que recibe. Hagan un esfuerzo e imagínense que esos fines de interés común fuesen, además de mantener una factura del agua razonable, la financiación de teatros, líneas de metro, clubes deportivos , generación de energía limpia, etc.
Y ahora, hagan un último esfuerzo e imagínense que tan jugosa empresa no vaya a ser privatizada, repartida entre unos pocos amigotes para hacer unos buenos campos de golf en esos terrenos tan chulos y subir el precio del agua en unos meses... eso sí, sin que se note mucho de qué va esto, ya saben, hay que reducir la deuda y esas cosas.
Gonzalo Rodríguez Marín

Agur, Benjamín González;
agur, jauna
A mi compañero y amigo Benjamín González, fallecido en Urkiola, en accidente de montaña. Quiero pensar que bajo aquel sol radiante de la primavera conseguiste tu objetivo. Testarudo y tenaz como tú eras... Quiero pensar que hiciste cumbre y que respiraste muy profundo el aire puro de la cima... A pulmones llenos; pleno y feliz... Quiero pensar que allá arriba, disfrutando del paisaje, esbozaste una sonrisa enorme y amplia de las tuyas; satisfecho... Y que te sentiste libre y radiante; inmenso entre las montañas; grande, como tú eras... Y quiero pensar que entonces volviste a llenar tus pulmones de ese aire puro y fresco de la cima. Muy profundo... Y que así te nos fuiste, amigo... Feliz en tu cumbre, bajo el sol de la primavera... Observándonos a todos... Regalándonos para siempre tu sonrisa eterna... Agur lagun mina. Nunca te olvidaremos.
César Fernández Rollán
Barakaldo

Más Noticias