Gobernar la inmigración
Josep Antoni Duran i Lleida alerta de que hay "más inmigrantes de los que tendría que haber" e incluso niega la escuela a los hijos de inmigrantes porque "retrasan" al resto de alumnos. Todo eso es así porque él, demócrata y hombre de fe, lo cree así, incluso aunque los datos digan lo contrario. Y abre el peor discurso posible: el que define la inmigración como un problema ligado al número de inmigrantes soportable por la sociedad. Alimenta el imaginario colectivo que ve la inmigración como ingobernable, pero es un proceso social reversible si se igualan los niveles de desarrollo Norte-Sur.
Todos somos necesarios, incluso quienes piden al voto en clave xenófoba, pues nos recuerdan dos tareas todavía por hacer: alcanzar el entendimiento entre culturas y conseguir el respeto a la dignidad humana. Objetivos nunca conseguidos plenamente, pero muy presentes en la vida de la mayoría, votemos o no en las elecciones.
Luis Fernando Crespo Zorita / Alcalá de Henares (Madrid)

Preparando el terreno
para el 20-N
Que nadie piense que las declaraciones de María Dolores de Cospedal sobre la reforma de las prestaciones por desempleo son una metedura de pata, porque todos los hilvanes de la derecha llevan hilo; aunque me temo que la retórica fácil ya ha calado en la sociedad de tal forma que hemos convertido en deporte nacional culpar de todo a los "gobiernos socialistas derrochadores", por lo que no es de extrañar que asumamos con naturalidad cualquier infortunio. Y la mecánica está siendo sencilla; una vez en el poder, basta con esgrimir el sambenito de "por su mala gestión nos vemos obligados a..." y ahí quedan los ejemplos: primero fue el programa oculto de CiU, que nada más ganar las elecciones catalanas, en noviembre de 2010, comenzó con los recortes en sanidad. Y lejos de escarmentar, el 22 de mayo de 2011 volvimos a caer en la trampa populista y ahora vuelven más recortes. Si el 20-N no salimos todos a votar en masa es que la sociedad tiene un grave problema, porque el descaro es de tal calibre que los mismos que ampararon a los especuladores que nos han metido en esta crisis ahora nos quieren preparar el terreno del día después.
Francisco Javier España Moscoso
Galapagar (Madrid)

El miedo a la realidad y al final
de ETA
La obsesión que el PP transmite a los ciudadanos a través de Cospedal y de Esteban González Pons sobre la posible desaparición de ETA debería ser considerada enfermiza. Están utilizando, de manera vergonzosa, la más que posible desaparición de la banda terrorista para acusar al Gobierno de utilizar a ETA en la precampaña electoral. Es decir, están utilizando lo mismo que están criticando. Esto sería cómico, si no fuera por la gravedad de estas declaraciones hechas, además, por dos de los principales portavoces del PP. Es posible que estos mensajes puedan llegar a una ciudadanía totalmente desorientada y produzcan los efectos deseados. Pero la sensación que tenemos otros muchos ciudadanos es que, en el PP, tienen auténtico pavor a que se produzca la gran noticia que estamos deseando desde hace muchos años: la desaparición del terror y la vuelta a la normalidad democrática para que el pueblo vasco decida, libremente, lo que quiere ser.
José Enrique Muñoz Blanco

El curso arranca sin profesores
en algunos institutos de Madrid
Mi hijo es alumno del IES Lope de Vega de Madrid, está matriculado en 2º de ESO. El curso empezó el 14 de septiembre y a día de hoy le faltan dos profesores: uno de Ciudadanía y otro de Inglés. Estos hechos me parecen una falta de respeto y una desconsideración hacia los ciudadanos, ya que la Consejería de Educación está jugando con el futuro y la formación de pequeños entre 13 y 14 años. Me consta además que este hecho no es aislado, pues ocurre en otros centros.
Los recortes y el desprecio a la educación pública, que es de todos, por parte de la Comunidad de Madrid, será la excusa que utilicen para decir que lo público no funciona y privatizar uno de los pilares fundamentales de nuestro Estado democrático: la educación.
Antonio Abad Arquer
Representante de los padres y madres en el Consejo Escolar del IES
Lope de Vega (MAdrid)

Reparar el dolor de las víctimas de Metro de Valencia
El 3 de julio de 2006, 43 personas murieron en un convoy de la Línea 1 de Metro Valencia que sobrepasó la velocidad establecida y descarriló. Otras 47 personas resultaron heridas. De esto hace ya más de cinco años. El expresidente Camps, pese a decir que los llevaba en el corazón, fue incapaz de recibirlos. Tras su dimisión, Alberto Fabra manifestó su deseo de realizar una gestión más accesible. Mucho va a tener que trabajar Fabra para reparar el enorme dolor de los miembros de esta asociación que, tras perder a sus familiares o sufrir graves heridas, se tuvieron que buscar la vida para curarse física y psíquicamente: la Administración nunca les ayudó.
Tuvieron que aguantar la burla que supuso una comisión de investigación en las Cortes Valencianas que duró a penas tres días, y donde sólo se aportaron los documentos y los expertos propuestos por el PP. Rita Barberá les impidió concentrarse en la plaza de la Virgen de Valencia con el pretexto que molestaban en las homilías que se celebraban en la basílica.
Han tenido que aguantar el feo que se les hizo al no colocar un monolito de recuerdo en el lugar del accidente, el cambio del nombre de la estación de Jesús, para así borrar lo que allí acaeció, y así un sinfín de cuestiones. Lo dicho, mucho tiene que hacer Fabra.
Óscar Pardo de la Salud
Valencia