Mayoría absoluta
El expresidente de la Comunidad Valenciana Francisco Camps ha vuelto a ganar otras elecciones en su región. Como era de esperar, la trayectoria política del expresidente se mantiene al alza, en las elecciones autonómicas de 2007 alcanzó 54 escaños de los 100 posibles (54 %); en las de 2011 obtuvo 55 de 100 (55 %); y en la última consulta realizada a sus paisanos, 5 de cada 9 (55,55 %). Su trayectoria ascendente es clara, si bien en el último ascenso se ha visto inmerso en multitud de situaciones embarazosas, algo que no es de extrañar porque ha estado rodeado de gente poco recomendable de la talla de Víctor Campos o Rafael Betoret, quienes acabaron por reconocer sus delitos. El marrón que se iba a comer se ha transformado en un marrón glasé para un postre al que creo que estamos todos invitados. La guinda será reubicarle en su sillón. Tiempo al tiempo.
Juan José Lázaro Herranz
Segovia

Barra libre en la Justicia
En esta legislatura conservadora veremos acciones muy extrañas de los poderes públicos. De momento, el Gobierno ha puesto en la cúpula policial a personas afines. En los casos judiciales en curso, empezarán a desaparecer y a aparecer pruebas, según convenga. Ahí no para la cosa. Para garantizar el todo vale, Rajoy –a través de Gallardón– anuncia que los jueces decidirán por ellos mismos los nombramientos de las jefaturas de todos los estamentos judiciales, y además estos puestos serán vitalicios (vaya disparate, sabiendo que la mayoría de nuestros jueces son conservadores y de los duros).
Volvemos a la Justicia de los años cincuenta. El PP, no contento con el copago sanitario, a través de Gallardón va a introducir el repago judicial, o sea, para recurrir a estancias superiores habrá que pagar, lo que supone justicia para los de siempre, es decir, los que tengan dinero, y así es como llegamos a la barra libre. Todo se irá diluyendo y al final aquí no ha pasado nada, y nuestros impuestos seguirán en los bolsillos de todos ellos y todos tan contentos.
J.M. Redondo
Segovia

Jurados inmaduros
Lo ocurrido con Camps tiene la misma raíz que otros sonados escándalos protagonizados por jurados. Recordemos, entre otros, la absolución de un asesino de ETA por un jurado temeroso en el País Vasco, sonado precedente de esta absolución de Camps por un jurado politizado. No es que haya exceso de democracia en la Justicia, sino que hay demasiados fallos en la educación y práctica de la democracia. Se tolera e incluso fomenta que en escuelas y medios de difusión predominen grupos que censuran la información y libertad de opinión, manteniendo o fomentando en importantes sectores de la población una ignorancia y unos prejuicios de los que surgen esos dañinos y vergonzosos frutos.
Juan José Fuente Hidalgo

Un obispo gracioso
Un obispo llamado Jaume Pujol ha decidido hacerse el gracioso y ha dicho que las mujeres no pueden oficiar misa igual que él no puede dar a luz; es decir, que genéticamente ellas no pueden ejercer las máximas funciones de su religión. ¡Viva el racismo sagrado! Pero, añade muy serio el susodicho, "todos somos iguales porque todos somos hijos de Dios y todos tenemos la misma dignidad". Es el mismo argumento con el que antes san Pablo consolaba al esclavo diciendo que no debía pretender ser libre, porque Dios lo había querido y tenía la misma dignidad que su amo. Está visto que estos jerarcas eclesiásticos no dejan de repetir la misma broma. Lo triste es que muchos ingenuos sigan cayendo en la trampa, en beneficio de sus amos, que pagan bien a sus bufones.
Josefa Ortega Oliar
Madrid

El equipo del (des)gobierno
Pensaba Rajoy que, como Zapatero lo había hecho tan mal –así se lo habían mandado desde Bruselas–, no hacía falta esforzarse demasiado a la hora de nombrar a los nuevos ministros. De modo que optó por reciclar a Cañete, Fernández Díaz Montoro y Pastor, añadiendo un experto en economía –procedente de empresas en quiebra– el tal De Guindos, un fabricante de armas en Defensa –Morenés–, y alguna que otra cara ya por todos conocida, como es el caso de Ana Mato. Con semejante equipo de ministros grises, aún sobresaldría más la valía de don Mariano. Pero se han pasado en mediocridad y descoordinación y, al mes de ser nombrados, rivalizan para ver quién de ellos –incluida la portavoz– se significa de manera más ridícula y superlativa. Cambio, sí, pero a peor y mucho.
Marc Antoni Adell
Valencia

¿Por qué dejó de investigarse?
Cuando los niveles de contaminación superen continuamente los mínimos permitidos, cuando las emisiones químicas disueltas en la atmósfera nos originen esas enfermedades incurables que da miedo mencionar, cuando nuestros ecosistemas se vean asolados por la desertificación y el abandono administrativo, cuando las catástrofes meteorológicas se incrementen y aceleren, entonces nos preguntaremos: ¿Aquello por qué dejó de investigarse? El Centro de Estudios Ambientales del Mediterráneo (CEAM), con sede en el Parque Tecnológico de Paterna y con una trayectoria investigadora de más de 20 años, pasa por sus peores momentos. La actual crisis económica y el olvido y postergación de la Generalitat Valenciana hacia esa Fundación la está llevando a una situación insostenible.
Paco Iniesta Cortes
Valencia