Sobre Bolonia
Susana Narotzky publicó el 19 de diciembre en el Dominio Público un artículo sobre Bolonia titulado Bolonia merece un debate. El texto carece de lo mismo que la mayoría de manifestaciones públicas que se han hecho contra el Plan: de rigor y de argumentos. Siempre hace mención a los estudiantes y la realidad es que, de un millón y medio de los alumnos universitarios españoles, tan sólo se han movilizado unos tres mil, de los cuales algunos están encerrados en facultades en compañía de otros jóvenes que no tienen nada que ver con la universidad.
Susana Narotzky sabe perfectamente que Margaret Thatcher no tiene nada que ver con Bolonia; sabe prefectamente que España es el único país de Europa que está viviendo este rechazo minoritario, irracional, vano y ruidoso; pero, sobre todo sabe perfectamente que Bolonia le va a dar más trabajo, porque quedarán atrás los apuntes amarillos con los que muchos colegas vienen ejerciendo la docencia desde hace lustros. Si en España un profesor del siglo XIX volviese ahora a las aulas del siglo XXI, no le costaría ningún esfuerzo adaptarse al sistema y, a no ser por su vestimenta, pasaría totalmente desapercibido. Lo peor de Bolonia es que está llegando tarde.
José Luis Melgosa / Barcelona

Educamos en la burbuja de Disney
Es increíble lo que hemos evolucionado en educación familiar. El materialismo consumista de la sociedad capitalista nos ha desbordado y lo hemos llevado hasta el extremo de confundir educación con abundancia material.
El resultado es que intentamos compensar nuestra falta de tiempo con todo aquello que podemos comprar materialmente. Eso no es educar. ¿Y qué hay de infundir el carácter emprendedor en nuestros hijos?
Llega la Navidad y la fiesta de Reyes. Nuestros hijos van a recibir no menos de 10 paquetes cada uno. Y a estos hay que sumar los regalos del cumpleaños, del santo, de cuando llega la abuela, etc. Al final, tenemos que ir tirando juguetes de menos de 3 meses de antigüedad.
Pero el problema se agrava con la actitud que adoptan estos chavales. Es la generación del sí puedo, de creerse que tienen derecho a todo, porque se lo hemos dado todo. Y no es más que el resultado de la educación que les hemos dado. Para salir del paso, intentamos que el colegio lo remedie, pero no podemos confundir educación con preparación académica.
Óscar Sánchez / Barcelona

Fútbol y política
Quiero, y digo sólo quiero, seguir pensando que la política nada tiene que ver con el deporte, en este caso, el fútbol. Por ello, creo que los jugadores de la selección de Euskadi le hacen muy flaco favor al deporte con su postura en el ya tradicional partido de Navidad. Tampoco favorecen a los aficionados del histórico Athletic de Bilbao –con los que me identifico–, que hay muchos y no sólo en dicha tierra.
Se habla de muchas razones para haber tomado dicha postura, incluso del miedo y la coacción, pero, en fin, ellos sabrán lo que hacen y las repercusiones que conlleva.
Federico José Marín / Extremadura

De olores y bajadas
Al PP le toca esta semana organizar polémica con las partes bajas o los bajos políticos. Rajoy dice a Zapatero que se ha bajado los pantalones ante el PNV para conseguir que vote sí a los Presupuestos Generales del Estado, pero su partido actuó igual cuando gobernaba, solo que entonces consideraba normal pactar con ese partido y con otras formaciones nacionalistas.
Pero lo más sorprendente es que se censure el precio del contrato de alquiler y mantenimiento de los urinarios de Presidencia de Gobierno, un contrato que viene de la época en que gobernaba Aznar y Rajoy era vicepresidente. Dice una diputada conservadora que la política socialista huele mal y, por eso, se gastan el dinero en ambientadores caros.
En realidad, la política ya olía mal con el Gobierno de Aznar, que es cuando se firmó ese primer contrato de mantenimiento y alquiler de urinarios.
Antonio Nadal / Zaragoza

Otra vez la pinza
Estimado Sr. Lara: no tengo el gusto de conocerle, ni tampoco sé de su trayectoria política, pero me ha dejado impresionado con sus primeras declaraciones como coordinador general de Izquierda Unida.
Parece que no ha pasado el tiempo. Cuando el PSOE gobernaba en su tercera legislatura, Izquierda Unida entró en una dinámica anti-socilista que algunos calificamos de "pinza a la griega"; era una connivencia no escrita, pero evidente con el PC griego y los conservadores, que culminó con infinidad de huelgas.
Sr. Lara, en pleno siglo XXI no podemos seguir utilizando el recurso a la huelga general como la purga Benito económica que todo lo arregla, sobre todo, porque la raíz del problema no está en tal o cual política social. ¿Cree usted realmente que lo que España necesita para salir de la crisis es una huelga general?
Francisco Javier España / La Navata (Galapagar)

Cuestión de lengua
La lengua, definitivo signo de referencia de los pueblos, constituye algo altamente delicado como para que los políticos pretendan forzar algo tan natural como es la forma en la que cada cual prefiere expresarse, sin imposiciones, ni prohibiciones.
Quien determina el uso de una lengua es la propia sociedad y no sus gobernantes, que nunca deberían interferir en la voluntad de los ciudadanos que marcan el camino en el uso de su lengua de referencia como vehículo de comunicación.
Jordi S. Berenguer / Barcelona