¡Caray, con los respetadores contumaces de sentencias! Les sale una que no les baila el agua y se ponen subversivos y, de propina, derrotistas. "ETA gana, España pierde", gimoteaba a moco tendido La Razón, junto a una imagen del edificio del Constitucional aliñado con una rojigualda. A la derecha, seis fotos que señalaban así a los villanos: "Estos son los magistrados que dieron el sí a Bildu". Enrabietado, el editorialista de ABC ampliaba la lista de culpables de las cuitas cavernícolas: "No sólo ETA y el PNV -siempre, a las duras, juntos- deseaban esta sentencia del TC. También los socialistas que viven con vértigo o con miedo o con prejuicio que el fin de ETA pudiera venir, tal y como estaba llegando, de la mano de la ley y de la justicia".

Por ahí supuraba también la herida de La Gaceta, que acusaba en primera: "El PSOE lleva a ETA a las urnas". Como complemento imprescindible, los cromos de los jueces para que los lectores se queden con sus caretos, bajo este epígrafe: "Los seis magistrados que se han prestado a la patraña pactada por el Ejecutivo". Y en el desabrido editorial, la puntilla: "El Constitucional no ha frenado el acceso de los cachorros de ETA a las elecciones. Su celo garantista protege a quienes el Supremo describe como testaferros de los violentos, lo que parafraseando a Ortega Lara demuestra que el TC parece estar más cerca de los asesinos que de los asesinados.

Pedro J. está triste

En Libertad Digital, un calco. "Los magistrados del PSOE aprueban las listas de ETA", denunciaba en el frontis de su página. Sordo y ciego ante la decisión judicial, el editorialista pataleaba: "Bildu es una marioneta diseñada por los terroristas, programada y activada por los pistoleros para allanar su camino hacia la impunidad y disfrutar, de paso, de una fuente de ingresos públicos con los que seguir alimentando su maquinaria criminal".

Luto riguroso también en El Mundo, que titulaba: "Seis jueces del TC propuestos por el PSOE legalizan Bildu-Batasuna". En el editorial, otro sollozo: "Un fallo que hará retroceder la lucha contra ETA". Blandengue, sí, pero es que el ánimo del patrón, Pedro José Ramírez, está por los suelos, como prueba el fatalismo de una de sus pedradas en Twitter: "Somos la única democracia que hace bueno el aserto de Lenin: damos a los nacionalistas la cuerda con la que nos ahorcarán". ¡Ay, qué pena más grande!