Juan Carlos Escudier

Pese a mi insultante juventud, llevo más de veinte años juntando letras, posiblemente porque nunca he sabido hacer otra cosa.

En Diario 16 me enseñaron el oficio y en El Mundo lo puse en práctica. En ese tiempo aprendí todo lo bueno de esta profesión y todo lo malo, que no es poco. En El Confidencial me hicieron adjunto al director y me dejaron opinar. Y más tarde, en 20 Minutos me puse a perseguir políticos hasta que se acabó el dinero.

He escrito dos libros, pero para hacer todo en la vida me falta tener un hijo y plantar un árbol. De momento, voy ensayando con macetas. Hay cosas que, como Bartleby, el escribiente de Melville, preferiría no hacer. Pero esa es otra historia.

La tránsfuga

Roma no pagaba traidores, pero el PSOE, que escucha a Zapatero tocar la lira en medio del incendio de los cuatro millones de parados,...

Esperando a Ternera

Ahora que ETA está en descomposición y, según Rubalcaba, debate sobre si debe abandonar o no las armas, no faltan quienes alertan sobre la...

Obama a la vista

Zapatero se nos ha ido a Londres a arreglar el capitalismo pero, como Sarkozy, se ha dejado en casa a su doña, Sonsoles Espinosa,...

Linces y condones

La campaña de los linces de la Conferencia Episcopal sobre el aborto ha coincidido con el inicio en Camerún de la gira africana del...